¡La muerte de la baranda judicial!
Al oído de los procesalistas y de la administración de justicia.
“El Estado es un gigantesco robot al cual la ciencia le ha podido crear el cerebro, pero no el corazón.” Carnelluti
Me gusta la justicia virtual, pues nos permite trabajar sin desplazarnos de nuestro hogar o desde nuestro sitio de trabajo a un despacho judicial y porque adicionalmente nos evita la fatiga, la contaminación, los costos en tiempo y dinero que produce el transporte a una sede judicial y el retorno de ella a una oficina y, como es obvio, el desgaste que todo ello nos produce, pero, lamentablemente, la virtualidad ha deteriorado, de manera dramática, las relaciones entre jueces y funcionarios judiciales, problema que se acentúa por el stress que el encierro nos produce y todo ello nos obliga a enfrentamos a una justicia ciega, sorda, muda, lenta, politizada y deshumanizada.
José León Jaramillo Jaramillo es abogado litigante, reconocido columnista de opinión . Además, ha ocupado importantes cargos en los sectores público y privado, como que fue procurador general de la nación (e). Leer más.